jueves, 14 de febrero de 2019

Mi estímulo


Y te miro, y tiemblo, vida,
sobrepasado de estímulos,
o sosegado… es lo mismo
¡qué te miro y tiemblo!
No es miedo, no,
eso ya lo superé,
siquiera es respeto,
contra eso, ya jugué…
Es… es que te miro, y tiemblo, vida,
despiertas mi alma dormida,
reavivas mis inercias,
amanece la cadencia,
de un ser que en pleno ama,
ausente de que haya un mañana,
insoportable en tu ausencia.
Así es, te miro y tiemblo, vida,
mantienes mi mente encendida,
sostienes mi idílico mundo,
en cromas maravillosos,
de luz y color hermosos,
inimaginables paletas vivas,
fragancias, frescos olores,
penetrando en lo profundo,
mientras yo me vengo arriba.

Te necesito, mi niña,
es tu tesón, tu fuerza la que me mueve,
acércate a mi en la orilla,
que allá las olas, apenas se mueven
que no .embarrancará la quilla.
en aguas de cielo y verdes.

Que sea el brillo de tu inteligencia,
quien nos mueva a los mundos leves,
nulos de malos ratos.
plenos de luz y mieles.

Que tu cariño me envuelve,
que eres primavera, brisa,
que rezo porque me quieras,
mientras me dure la vida,
y que de mí no te canses,
que soy hombre en tu caricia,
en tu cariño y sonrisa,

José Carlos
14/02/2019

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