La observo mientras duerme y pienso,
en cómo sería la vida,
alejado de su sonrisa,
privado de sus labios tiernos,
y me devoran los miedos,
me asusta solo pensarlo…
¡no podría soportarlo,
el sufrir ese tormento,
de no tenerla a mi lado,
de no acariciar su pelo,
ni confortarme en sus besos!…
La observo mientras duerme y siento,
que soy muy afortunado,
que siempre viajé abocado,
hacia destinos oscuros,
y fue su espíritu puro,
quien enmendó mi trayecto,
llevándome hacia la fuente,
que refrescaba mi mente,
en su tránsito inseguro,
camino de tristes puertos,
calmando la sed cadente.
La observo mientras duerme y noto,
amor corriendo en las venas,
caudal que aplasta a la pena,
e insufla brisa al ahogo
y aromas de hierbabuena,
Sigue soñando princesa,
que aun no ha llamado el alba,
y antes de que el sol salga,
aun refulgen estrellas,
iluminando tu cara,
suave como la seda,
y rebosante de calma,…
que yo velaré despierto,
acariciando tu espalda,
mientras susurro ¡Te Quiero!
Precioso este poema y con una ternura, se nota que la quieres mucho.
ResponderEliminarUn abrazo
Gracis paisana. Otro enorme para vos :))
ResponderEliminarPreciosos digo como la de arriba, un compendio de los sentimientos que inundan tu alma....¿se lo has dicho? no lo dudo, por activa y por pasiva....ya puede estar feliz como una perdiz...me ha gustado mucho..
ResponderEliminarGracias :)) chuchicuchi... pues sí, se lo he dicho y trataré de seguir haciéndolo a lo largo de mi vida compi. Un abrazo apañera. Muchas gracias por el comentario.
ResponderEliminarFelicitaciones a los dos, Cons, a ella por ser la musa inspiradora y a ti por honrarla y quererla. ¡Amor eterno! Un abrazo amigo.
ResponderEliminarHermoso sentimiento, q plasmas en ese cuadro; pintado con el mas puro amor a la persona q te sirve de inspiración!!!
ResponderEliminarQue hermosoooooooo
ResponderEliminarNo tanto como un bicho verde que yo me se (pistacho, claro) ;)
ResponderEliminarMuchos besos