silenciosa y dulce calma,
solo el murmullo bravío,
del retozar del agua.
Suave brisa de la sierra,
fragancia de madrugada,
bálsamo de una tierra,
de sentimientos sembrada.
Atorado firmamento,
ya no caben más estrellas,
luceros majestuosos,
iluminando la vega.
En tres estrofas has creado una sensación visual geográfica extraordinaria.
ResponderEliminarMe ha gustado
Saludos
La noche, que delicia, tranquilidad, ver iluminada la ciudad...
ResponderEliminarUn poema precioso.
Que sensacion de frio y vacio... Bonito poema.
ResponderEliminarGracias por regalarme una magnífica noche, imágenes clarísimas en versos inspirados.
ResponderEliminarUn abrazo.
Una vez más, un nuevo lucimiento o una nueva iluminación... :)
ResponderEliminarMuchas gracias vaquero. Un placer tenerte entre mi gente. :)
ResponderEliminarMe imagino fuegos artificiales en medio de la nada, solo la vega. Tantas estrellas que rompen en fugaces la viste la vi, maravilloso espectáculo en un idílico lugar que solo tu conoces
ResponderEliminarPara que pedir más si el cielo embarga nuestra sensación de libertad...abrazzzusss
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